Un reciente incidente diplomático entre el Gobierno colombiano y Estados Unidos ha encendido las alarmas no solo en el ámbito político, sino también en el económico. Este conflicto amenaza con impactar directamente a las más de 5 millones de micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), que representan el 90% del tejido empresarial colombiano y generan más del 70% del empleo formal.

Desempleo Masivo y Contracción Económica

Si las exportaciones colombianas se enfrentaran a aranceles más altos, muchas empresas perderían competitividad y no podrían exportar su capacidad productiva completa. Esto llevaría a despidos masivos y una contracción económica sin precedentes.

Inflación y Recesión

El encarecimiento de productos importados como maquinaria, tecnología, celulares y computadores generaría presiones inflacionarias. Esto impactaría directamente a las familias colombianas y a las empresas, que tendrían que pagar más por bienes esenciales para su operación.

Pérdida de Competitividad

La falta de acceso a tecnología de punta y repuestos críticos hundiría aún más a Colombia en el rezago económico, disminuyendo la competitividad de las Mipymes.

La Diversificación de Mercados, una Estrategia Clave

Ante el riesgo de depender de un solo socio comercial, expertos como Edgar Felipe Arcila, presidente de la Asociación de Pymes, Microempresas y Emprendimientos para el Comercio Electrónico (APPCE), hacen un llamado urgente a diversificar los mercados y fortalecer las relaciones comerciales con Europa, Asia y América Latina.

“Diversificar nuestros proveedores y mercados nos permite tener soluciones más seguras, evitando interrupciones críticas en la cadena de suministro. Igualmente, debemos apostar por fortalecer el consumo interno y fomentar la compra de productos nacionales, lo que dinamiza la economía local y genera empleo”, afirmó Arcila.

Fortalecer el Consumo Interno

Una estrategia complementaria para mitigar los riesgos de una relación comercial inestable con Estados Unidos es fomentar la compra de productos nacionales. Esto no solo dinamiza la economía local, sino que también genera empleo y fortalece el tejido empresarial colombiano.

Un Llamado a Proteger a las Mipymes

Las Mipymes son el motor de la economía colombiana. Protegerlas debe ser una prioridad nacional. Cada decisión en política exterior y economía debe pensarse estratégicamente y con una visión a largo plazo que garantice el crecimiento sostenible del país.

Como señaló Arcila, “el costo de una relación deteriorada con nuestro principal socio comercial sería catastrófico para nuestras Mipymes, que ya enfrentan grandes desafíos estructurales. Es vital que las relaciones internacionales se manejen con prudencia, estrategia y visión”.

Si las Mipymes Crecen, Colombia Crece

En este panorama de incertidumbre, proteger y garantizar el desarrollo de las Mipymes es esencial para asegurar el futuro económico de Colombia. Desde la diplomacia hasta las políticas económicas, cada decisión debe priorizar el bienestar del sector empresarial más importante del país.

Con una combinación de diversificación de mercados, fortalecimiento del consumo interno y estrategias diplomáticas prudentes, Colombia puede enfrentar estos desafíos y garantizar un crecimiento sostenible.