Hacia un campo más productivo y digno: más de 34.900 personas beneficiadas en 15 municipios de Cundinamarca
En el marco de la 59ª Asamblea Anual de Afiliados de Camacol Bogotá y Cundinamarca, la Caja de Compensación Familiar Compensar fue reconocida con el Premio a la Responsabilidad Social gracias a su iniciativa ‘Programa de Bienestar Rural: Vecindarios Productivos’, una estrategia integral que durante una década ha transformado la vida de miles de familias campesinas en zonas rurales del departamento.
Una apuesta sostenible por el desarrollo rural
El programa, que ya ha beneficiado a más de 34.900 personas en 15 municipios de Cundinamarca, tiene como objetivo impulsar el desarrollo económico, social y habitacional de comunidades campesinas en situación de vulnerabilidad, especialmente aquellas afectadas por el conflicto armado. Esta iniciativa está alineada con los desafíos rurales del país, donde el 42,1% de la población colombiana reside en zonas rurales, una cifra superior al promedio de países OCDE.
“Nos sentimos honrados por este reconocimiento que valida una apuesta por construir país en territorios con deudas históricas. Nuestro compromiso es continuar fortaleciendo el bienestar de las comunidades rurales, brindándoles herramientas para prosperar sin necesidad de migrar a zonas urbanas”, afirmó Juan Pablo Mejía, gerente de Vivienda y Subsidio de Compensar.
Tres pilares de transformación: inclusión social, económica y habitacional
La estrategia de Compensar se articula en torno a tres ejes fundamentales:
1. Inclusión social
Se desarrollan espacios seguros para mujeres rurales, programas de salud mental, actividad física y liderazgo para adultos mayores, así como procesos de participación comunitaria. Dos lideresas campesinas hacen parte del Consejo Departamental de Mujer, impulsando incidencia política desde el territorio.
2. Inclusión económica
Compensar acompaña procesos de emprendimiento rural, fomenta la formalización laboral y apoya asociaciones productivas. Actualmente compra productos agrícolas directamente a ocho organizaciones campesinas en seis municipios, eliminando intermediarios y fortaleciendo el comercio justo.
3. Inclusión habitacional y ambiental
El programa brinda orientación para acceder a subsidios de vivienda rural, incluyendo mejoramiento y construcción en sitio propio. Además, promueve modelos arquitectónicos adaptados a las condiciones climáticas y culturales del campo colombiano.
Crecimiento y expansión del impacto
Desde su lanzamiento, el programa pasó de 546 beneficiarios anuales a más de 7.200 en 2024, con proyecciones de expandirse a 21 municipios en los próximos cinco años. Esta evolución ratifica la importancia de generar políticas y programas estructurales que dignifiquen la vida rural.
“Nuestro propósito es consolidar el campo como un espacio de bienestar, productividad y arraigo. Queremos que las comunidades rurales vean en sus territorios un futuro posible y sostenible”, concluyó Mejía.