En un entorno de constante transformación, la industria de Entretenimiento y Medios (E&M) ha logrado superar desafíos disruptivos, recuperando su estabilidad en el último año con un incremento del 5 % en sus ingresos globales. Sin embargo, las perspectivas de futuro siguen siendo desafiantes, ya que varios sectores clave deben adaptarse a cambios estructurales. A continuación, analizamos cómo se está redefiniendo el consumo audiovisual en Colombia, destacando las tendencias actuales y los desafíos a superar.
Crecimiento y retos en el sector de Entretenimiento y Medios
Según el informe Global Entertainment & Media Outlook (GEMO) de PwC Colombia, se espera que los ingresos globales de la industria de Entretenimiento y Medios superen los US$3.4 trillones para 2028. Aunque la recuperación del sector es un hecho, varios segmentos clave están experimentando un crecimiento moderado, particularmente los servicios de streaming over-the-top (OTT).
Streaming: Un crecimiento más lento pero constante
El mercado de streaming continúa expandiéndose, aunque a un ritmo más lento que en años anteriores. La competencia es feroz y las plataformas se ven obligadas a adaptar sus estrategias para seguir siendo competitivas. Modelos híbridos financiados con publicidad, que permiten tarifas de suscripción más bajas a cambio de la visualización de anuncios, y restricciones en el uso compartido de contraseñas son algunas de las tácticas implementadas para maximizar los ingresos. A pesar de este enfoque, se prevé que el ingreso promedio global por suscripción a servicios de video OTT aumente ligeramente de US$65.21 a US$67.66 entre 2023 y 2028.
La televisión por Internet: Un cambio de paradigma
El consumo de contenido en Colombia está migrando hacia la televisión por protocolo de Internet (IP). Se espera que esta modalidad crezca aceleradamente, alcanzando 1,2 millones de hogares para 2028, con un crecimiento proyectado del 14,5 %. Este cambio está poniendo en jaque a los operadores tradicionales de televisión de pago, quienes no se verán completamente desplazados pero tendrán que adaptarse a los nuevos modelos de consumo.
Aunque los ingresos por suscripciones de televisión de pago crecerán hasta US$980 millones en 2028, frente a los US$812 millones en 2023, se prevé que 600,000 hogares corten el cable en los próximos años, lo que refleja una disminución de la base de usuarios, especialmente en el caso de la televisión por cable, que experimentará una caída del -6,3 % en términos de tasa compuesta anual de crecimiento (CAGR).
El cine en Colombia: Recuperación y crecimiento continuo
El cine colombiano ha vivido una recuperación significativa, especialmente después de los efectos de la pandemia y la competencia de las plataformas de streaming. El 2023 marcó un hito, con más de 53 millones de boletos vendidos, la cifra más alta desde la crisis sanitaria. Se espera que para 2028 esta cifra llegue a 71 millones, con un crecimiento anual compuesto (CAGR) del 8,6 % en los ingresos de taquilla.
Este fenómeno refleja no solo el interés renovado por la experiencia cinematográfica en salas, sino también una creciente producción local y una mayor atracción de inversiones extranjeras. El cine sigue siendo un espacio donde la experiencia colectiva y la emoción de ver una película en la pantalla grande siguen siendo invaluables para muchos colombianos.
El futuro del sector audiovisual: Adaptación a los nuevos tiempos
Jorge Mario Añez, socio líder de la industria TMT de PwC Colombia, resalta que, a pesar de los desafíos, los sectores tradicionales del entretenimiento y los medios deben adaptarse a un entorno cada vez más digitalizado. “La innovación, aunque inevitable, no debe comprometer la esencia de la oferta original, ya que esta puede ser la mayor fortaleza para preservar la experiencia del consumidor, cada vez más exigente”, asegura Añez.
La industria de entretenimiento y medios en Colombia está evolucionando rápidamente, adaptándose a las nuevas demandas del consumidor digital. Si bien los servicios tradicionales, como la televisión por cable y el cine, siguen siendo relevantes, su capacidad para innovar y adaptarse a los nuevos modelos de consumo será crucial para su crecimiento sostenido. La clave del éxito estará en encontrar un equilibrio entre la oferta tradicional y las nuevas demandas digitales.