El 4×1.000, también conocido como Gravamen a los Movimientos Financieros (GMF), es un impuesto que se aplica sobre transacciones financieras, como retiros, transferencias y movimientos de cuentas bancarias, a una tasa del 0.4%. A partir del 13 de diciembre de 2024, se implementarán cambios que flexibilizan algunas condiciones, ofreciendo exenciones para ciertos tipos de cuentas, como las de nómina, pensiones y otras transacciones de bajo monto.
Estos cambios están diseñados para fomentar el uso de cuentas bancarias y mejorar la inclusión financiera, beneficiando a aquellos que mantengan un saldo promedio mensual dentro de ciertos límites. Las exenciones se aplicarán a cuentas de ahorro menores y aquellas con movimientos que no superen un umbral establecido.
Además, con esta reforma, las transacciones estarán más claras para los usuarios, ya que el descuento del 4×1.000 se reflejará al instante en cada operación, mostrando de manera detallada el valor del impuesto deducido en el momento del retiro o transferencia. Esto permitirá a usuarios y empresas planificar mejor sus finanzas y optimizar el uso de los beneficios de las exenciones.
El impacto de esta medida será especialmente relevante para las pequeñas y medianas empresas, y aquellos que operan en sectores productivos, ya que disminuirá la carga fiscal en movimientos financieros de bajo volumen. Es importante estar atentos a estos cambios y gestionar adecuadamente los límites exentos del impuesto para maximizar los beneficios.
Además, esta medida pretende incentivar el uso de la banca formal, ofreciendo mayores ventajas en cuentas específicas para reducir el costo que el 4×1.000 implica sobre el capital disponible en pequeñas y medianas transacciones, impactando especialmente a aquellos que se encuentran en sectores productivos o actividades económicas emergentes.