Con la mirada puesta en el futuro, las empresas deben ajustar sus finanzas para enfrentar nuevos desafíos y aprovechar las oportunidades que ofrecerá 2025.
En este tercer trimestre del año, las empresas comienzan a planificar y organizar sus finanzas para el próximo año. La adecuada elaboración del presupuesto es crucial para garantizar tanto la estabilidad como el crecimiento empresarial en un entorno cambiante.
Según las proyecciones macroeconómicas para Colombia en 2025, se estima un crecimiento del PIB del 2,6%, inflación moderada del 3,84%, y una tasa de política monetaria del 5,82%. Esto contrasta notablemente con las condiciones financieras de 2024, lo que hace aún más necesario realizar ajustes en el presupuesto para mitigar riesgos y maximizar las oportunidades.
Un presupuesto bien estructurado permite coordinar, evaluar y controlar los planes de acción necesarios para alcanzar las metas definidas en la planificación estratégica. Esta herramienta financiera proporcióna una visión integral de la posición financiera de la empresa, resultando esencial para ajustar las proyecciones y estrategias a las realidades tanto nacionales como internacionales.
Cuatro elementos clave para el presupuesto de 2025
Orlando Garzón, Gerente Financiero de Cesce Colombia, destaca cuatro aspectos fundamentales que su empresa debe considerar al elaborar el presupuesto para 2025:
1. Alineación con los objetivos estratégicos: Es esencial que el presupuesto esté alineado con los objetivos estratégicos de la organización. Involucrar a todas las áreas clave—finanzas, comercial, producción y tecnología—garantiza una planificación consensuada que refleje la realidad de la empresa.
2. Análisis de factores internos y externos: Cada área de la empresa posee un conocimiento profundo de sus particularidades y puede ayudar en la previsión de resultados. Además, es fundamental contar con el apoyo de expertos para analizar indicadores clave como:
- Crecimiento del PIB: Una evaluación cuidadosa es necesaria ante la incertidumbre económica.
- Inflación Sectorial: Determinar cómo la inflación impactará en el sector es vital para la planificación.
- Tasa de Cambio: Las fluctuaciones pueden repercutir en las obligaciones en moneda extranjera.
- Tasa de Interés: La expectativa de reducción en las tasas ofrece oportunidades para refinanciamiento.
- Evolución de la Cartera de Crédito: La mejora en condiciones de crédito puede facilitar la expansión.
3. Definición de metas claras por área: El presupuesto debe reflejar objetivos específicos para cada departamento, lo que facilitará el seguimiento y la asignación eficiente de recursos. Esto fomentará la responsabilidad y permitirá evaluar el desempeño de cada área en relación con las metas generales de la empresa.
4. Control y seguimiento efectivo: Contar con un presupuesto detallado permite establecer un control riguroso sobre las actividades clave. Este mecanismo facilita la toma de decisiones necesarias ante desviaciones o problemas financieros, asegurando que la empresa se mantenga en el camino hacia sus objetivos.
“Un presupuesto estructurado y adaptado a las necesidades de cada empresa proporciona un control exhaustivo de la eficiencia operativa y permite identificar desafíos tempranamente”, afirma Orlando Garzón.