La retroalimentación, pieza clave en el desarrollo de los colaboradores
Dar y recibir retroalimentación es fundamental para el crecimiento y desarrollo profesional dentro de una organización. Este proceso no solo contribuye a mejorar el desempeño individual, sino que también impacta directamente en la satisfacción laboral y en el cumplimiento de los objetivos empresariales.
Según la investigación FEEx – FIA Employee Experience, los empleados que reciben retroalimentación de manera regular reportan un 22% más de satisfacción laboral. Sin embargo, muchas organizaciones aún enfrentan barreras para consolidar esta práctica dentro de su cultura corporativa.
La importancia del liderazgo en la retroalimentación efectiva
Grupo Familia, una compañía Essity, destaca la importancia de la retroalimentación como una herramienta clave para el desarrollo continuo de los equipos. Según María Juliana Ortiz, directora de Recursos Humanos para la Región Andina y Caribe, un liderazgo efectivo es esencial para facilitar este proceso.
«La retroalimentación efectiva no solo contribuye a mejorar el desempeño de cada colaborador, sino que también fortalece la comunicación y la colaboración dentro de los equipos», afirma Ortiz.
Los líderes desempeñan un papel crucial en la creación de un entorno de confianza que fomente el aprendizaje y la mejora continua. Además, el inicio del año es un momento estratégico para organizar reuniones con los equipos, definir los objetivos de 2025 y alinearlos con los planes de carrera de cada integrante.
Empresas con cultura de feedback tienen mejores resultados
La investigación «The Power of Feedback», de Zenger & Folkman, reveló que las organizaciones con una cultura de retroalimentación frecuente y estructurada logran un 25% más de éxito en la consecución de sus resultados.
Además, los líderes que implementan este tipo de prácticas son percibidos como más efectivos, lo que fortalece el compromiso de los empleados y genera un impacto positivo en la organización.
Claves para una retroalimentación efectiva en el entorno laboral
María Juliana Ortiz comparte seis recomendaciones clave para hacer de la retroalimentación un proceso estructurado y productivo:
1. Ser claro y específico
Brindar ejemplos concretos de comportamientos y resultados, destacando tanto logros como oportunidades de mejora.
2. Adoptar un enfoque constructivo
Enfatizar lo que puede mejorarse, proporcionando sugerencias prácticas para el desarrollo profesional.
3. Escuchar activamente
Fomentar un diálogo bidireccional en el que el colaborador pueda expresar sus percepciones y necesidades.
4. Equilibrar los comentarios
Resaltar tanto los puntos fuertes como las oportunidades de crecimiento, promoviendo la motivación.
5. Definir metas claras
Establecer objetivos específicos y medibles que contribuyan al desarrollo continuo del colaborador.
6. Mantener un tono positivo
Incentivar la confianza y el compromiso, demostrando apoyo en el crecimiento profesional del equipo.
Essity y su compromiso con el crecimiento del talento
Para Essity, la creación de un ambiente de aprendizaje constante es clave para el éxito organizacional.
«Estas recomendaciones ayudan a fomentar una cultura de retroalimentación efectiva, lo que contribuye al crecimiento tanto individual como colectivo dentro de la organización», concluye Ortiz.
La compañía reafirma su compromiso con el desarrollo de su talento humano, promoviendo un entorno laboral basado en la valorización del talento, la innovación y la excelencia en sus procesos.