Estudio revela que la modalidad híbrida es la opción más sostenible para el talento en Colombia
En 2025, muchas empresas en Colombia han impulsado el retorno a la presencialidad en oficinas o la adopción de modelos híbridos, buscando fortalecer la cultura organizacional, la productividad, la colaboración y la supervisión. Sin embargo, los cambios que trajo la pandemia transformaron los hábitos y expectativas de los trabajadores, generando resistencia frente a esquemas totalmente presenciales.
El estudio “Trabajo Remoto: entre la flexibilidad y la confianza”, realizado por INALDE y ConFyE (Centro Conciliación Familia y Empresa del IAE), confirma que obligar a los empleados a un retorno completo puede generar insatisfacción, rotación y pérdida de compromiso.
Principales hallazgos del estudio
- 42 % de los encuestados trabaja de forma remota entre uno y dos días por semana.
- Apenas 17 % lo hace cinco días o más.
- 58 % rechazaría un esquema 100 % presencial:
- 17 % lo haría con desagrado.
- 36 % buscaría otro empleo.
- 5 % consideraría renunciar.
Estos datos confirman que el trabajo remoto forma parte de las expectativas laborales actuales y que eliminarlo puede tener consecuencias directas en la retención y compromiso de los equipos.
Productividad y desempeño: más allá del lugar de trabajo
El estudio revela que la productividad no depende exclusivamente del formato laboral:
- 27 % asegura que supera sus objetivos trabajando en remoto.
- Solo 3 % afirma no alcanzarlos.
- 42 % considera que logra los mismos resultados desde casa que en la oficina.
- Apenas 45 % sostiene que el tiempo presencial “vale la pena”.
Lo determinante no es el lugar de trabajo, sino la organización de las tareas, el nivel de confianza y la claridad de los objetivos.
El rol del liderazgo en el trabajo remoto
El rendimiento de los empleados depende fuertemente de cómo los líderes gestionan la relación laboral:
- 80 % afirma que su supervisor confía en su eficiencia trabajando en remoto.
- 72 % considera que su organización les provee de buenas herramientas para desempeñarse.
Esto demuestra que el liderazgo orientado a resultados, más que al control presencial, es clave para sostener la productividad.
Balance vida-trabajo y bienestar
El trabajo remoto amplía la flexibilidad y mejora la gestión del tiempo, pero también implica riesgos de hiperconexión si no existen límites claros.
- 73 % está satisfecho con su balance vida personal–laboral.
- 72 % afirma que la comunicación con su supervisor no se ve afectada.
- 60 % asegura que sus hábitos alimenticios mejoraron trabajando en remoto.
- 30 % reconoce que su condición física se ha visto disminuida.
Por ello, el estudio recomienda implementar políticas de desconexión digital, protocolos de comunicación eficientes y liderazgo basado en confianza.
El modelo híbrido como camino sostenible
El análisis confirma que ni el 100 % remoto ni el 100 % presencial responden a las expectativas actuales del talento en Colombia. La modalidad híbrida se consolida como la opción más sostenible, equilibrando productividad, bienestar y compromiso.
El futuro del trabajo en el país dependerá de la capacidad de las organizaciones para adaptar sus políticas laborales, integrar flexibilidad con límites claros y promover un liderazgo que inspire confianza y resultados.